quinta-feira, 23 de julho de 2015

LA ODEBRECHT Y EL BNDES






(La Onda Digital - Traduccion de Cristina Iriarte) - En los últimos días, diarios y portales periodísticos han dado énfasis a la información que la asistencia financiera a la Odebrecht por parte del BNDES se habría “disparado” desde 2007 hasta ahora, y que los diplomáticos brasileños que prestan servicio en otros países y en Venezuela, habrían apoyado a la empresa y celebrado, en comunicados y correspondencia interna, el hecho de haber aumentado en los últimos años sus negocios en el exterior.

Se llama la atención sobre esto, como si hubiese algo irregular en estos dos hechos.
En primer lugar, que nuestro mayor banco de fomento, que lleva en sus siglas los adjetivos “económico” y “social”, financie a clientes internacionales de la empresa de ingeniería y construcción más grande de América Latina, la adquisición de productos y servicios brasileños.

Y, en segundo lugar, que diplomáticos brasileños le den apoyo a la expansión de empresas nacionales en el exterior, como lo hacen miles de veces, embajadores y encargados de negocios norteamericanos en todo el mundo, como se puede ver en cientos de cables publicados en Wikileaks.


De acuerdo a estos datos, los financiamientos del BNDES a clientes de la Odebrecht en el exterior, habrían pasado de un promedio de 166 millones de dólares por año, de 1998 a 2005, a mil millones de dólares, en promedio, luego, hasta 2014.
Una cantidad que equivale a un porcentaje – como el propio artículo acaba informando más adelante – de apenas un 8,4% de los contratos totales de la Odebrecht fuera de Brasil en el período, que totalizaron 119 mil millones de dólares, en su mayoría prestados por bancos internacionales – lo que muestra que el BNDES no está solo en su confianza en la empresa – para el financiamiento de la ejecución de proyectos de sus clientes en otros países.

Para tener una idea, los recursos del BNDES para financiar pagos a la Odebrecht alcanzaron en 2014 apenas un 7% de los 14 mil millones de dólares que la empresa facturó el año pasado.

Sin embargo, al leer el artículo, muchos lectores pueden llegar a pensar que este aumento fue sólo para la Odebrecht, o, como dicen muchos, que el BNDES ha invertido preciosos recursos fuera de aquí, en lugar de aplicarlos en proyectos dentro de Brasil.

Esto sería cierto, si, en los últimos años, el BNDES hubiese retirado de su presupuesto histórico, sin aumentarlo, dinero para obras en el exterior y si estas obras no hubiesen creado miles de empleos para brasileños, dentro y fuera del país.

Como proyectos de la Odebrecht en el exterior, se citan el subte de Caracas y de Los Teques, en Venezuela – el primer financiamiento para esta obra fue del gobierno de Fernando Henrique Cardoso – centrales hidroeléctricas y termoeléctricas en Ecuador, Angola, Perú, República Dominicana.

Pero lo que ocurrió fue exactamente lo contrario.

Los desembolsos del BNDES, para financiamiento de todos los sectores de la economía, pasaron de menos de 35 mil millones de reales en 2002, a 187 mil millones de reales en 2014.

Es más, si de 1990 a 2006, en 16 años, el dinero prestado por el BNDES EXIM, su brazo de apoyo a la exportación, fue de aproximadamente 23 mil millones de dólares, este aumentó, en sólo siete años, de 2007 a 2014, a más de 40 mil millones de dólares – para ser más exactos, 128 mil millones de reales, beneficiando no sólo a la Odebrecht y otras grandes empresas, sino, por medio de ellas, a miles de pequeñas y medianas empresas brasileñas.

Otra impresión que queda, para cierto tipo de público, al leer el texto, es que la Odebrecht parece ser una organización “tercermundista”, “comunista” y “bolivariana”, que sólo se expandió en el mundo gracias al apoyo del PT.

Como proyectos de la Odebrecht en el exterior, se citan el subte de Caracas y de Los Teques, en Venezuela – el primer financiamiento para esta obra fue del gobierno de Fernando Henrique Cardoso – centrales hidroeléctricas y termoeléctricas en Ecuador, Angola, Perú, República Dominicana, un gasoducto en Argentina, aeropuertos “como el de Nacala, en Mozambique”, y el omnipresente, en la prensa brasileña, desde hace un tiempo, Puerto de Mariel, en Cuba.

Pero no se dice nada, para mayor información de los lectores y de toda la sociedad brasileña, que, si la Odebrecht hizo obras en el puerto de Mariel, en Cuba, también las hizo en el Puerto de Miami, como la infraestructura que permitirá recibir los super cargueros que atravesarán el nuevo Canal de Panamá, ampliado; que si hace obras en el aeropuerto de Nacala, en Mozambique, también las hace en el aeropuerto de Miami – la nueva Terminal Norte del Miami Airport, construido por la Odebrecht, recibió el premio Global Best Projects, de la prestigiosa revista ENR, Engineering News-Record – o en los aeropuertos de Orlando y de Fort Lauderdale; que si hace el subterráneo en Venezuela, también ya hizo una especie de metro suspendido en Miami; carreteras como la Route 56, en California, la SR 836/I-395 en Florida, o la Sam Houston y la Grand Parkway, en Texas, viaductos como el Golden Glades y estadios como el American Airlines Arena, en Miami, centros culturales como el Adrienne Arsht Center for Performing Arts, en la misma ciudad, sistemas de protección hidraúlicos y ordenamiento hídrico contra inundaciones, como la Represa de Seven Oaks, en California, o el LPV-9.2, que protege las estaciones de bombeo del Lago Pontchartrain, en Louisiana, contra huracanes.

Todo esto en los Estados Unidos, país en el que está presente desde 1990, y en el cual emplea – entre ellos a muchos brasileños – a miles de trabajadores de 33 diferentes nacionalidades.

Como vemos, la situación es tan surrealista y absurda, que, aunque la capital de la Odebrecht, fuera de Brasil, sea Miami – la ciudad más conservadora de los EE.UU. – y no La Habana, su presidente está preso y es fustigado, diariamente, en las redes sociales brasileñas, por el supuesto “bolivarianismo” de su empresa y eventuales “conexiones” con el PT.

Ya hace algún tiempo que el BNDES viene siendo violentamente atacado en las redes sociales.

Se pretende, en la “libertad total” de la prorrogada, persistente, duradera, temporada de Caza del Cuerno en la Cabeza de Caballo, o del pelo en el huevo, involucrar, “de boca”, al Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social con alguna irregularidad.

Se convirtió en un lugar común decir que existe una “caja negra” del BNDES, que, de abrirse, sacudiría a la República – en los círculos más ignorantes sigue viva la leyenda urbana de que la familia Lula es dueña de la FRIBOI, también beneficiada por financiamientos del banco – cuando se trata de una de las más serias y competentes instituciones brasileñas, y de un pilar de gran importancia para el desarrollo económico y social del país.

Otro mito recurrente, en los últimos tiempos, es que las operaciones del BNDES en el exterior habrían abierto agujeros en el tesoro y ocasionado miles de millones de dólares de perjuicio al país.

Al contrario de lo que muchos piensan, el BNDES no acostumbra salar la carne en mal estado y es una de las instituciones más sólidas del mundo.

El índice de Basilea exige más del 11%, cuando el del BNDES es del 15,9%. El Capital Principal tiene que ser de más del 4,5%, cuando el del BNDES es del 10,6%. La Exposición Cambiaria tiene que ser menor al 30%, cuando en el BNDES es de apenas el 4,8%. La exposición al Sector Público debe ser de menos del 45%, cuando en el BNDES es del 26,2%. La inmovilización debe ser menor al 50%, cuando en el BNDES, es de sólo el 11,4%. Los datos son de diciembre de 2014.

Sus activos aumentaron de 782 a 977 mil millones de reales (eran menores a 43 mil millones en 2002) entre diciembre de 2013 y un año después. El Patrimonio Líquido subió de 60 a 66 mil millones de reales, la morosidad se mantuvo en un modestísimo 0.01% y las ganancias, el Resultado Líquido, subió de 8.150 a 8.594 mil millones de reales a fines de 2014.

Lo que dificulta la expansión de la infraestructura en Brasil no es la falta de dinero. Es la ortodoxia monetaria que impide que el gobierno se endeude, eventualmente, para desarrollar – e incluso defender – al país, como habitualmente lo hacen naciones como los Estados Unidos, que están entre los mayores deudores del mundo, y todo tipo de obstáculos y de sabotaje que hacen que obras como la Hidroeléctrica de Belo Monte – y la propia refinería Abreu y Lima – ya hayan enfrentado decenas de interrupciones.

El Congresso aprobó el fin del secreto de operaciones de financiación exterior del BNDES – vetado por la Señora Dilma Roussef – como si esta norma fuese practicada en bancos de apoyo a la exportación de países como Corea del Norte, cuando forma parte del comportamiento normal – para no entregar informaciones gratuitas a la competencia – de bancos e instituciones similares en naciones como Alemania (KFW), Canadá (Banco de Desarrollo de Canadá), España (ICO), y la JFC- Japan Finance Corporation y el JBIC – Japan Bank for International Cooperation, de Japón.

No tenemos mayores simpatías por la Odebrecht de las que tendríamos con relación a cualquier empresa que generase el número de empleos que genera y que fuese de la importancia estratégica que tiene para Brasil, dado que ella está al frente, entre otros importantes proyectos – condición también amenazada por los problemas que está viviendo ahora – de la construcción de nuestra nueva base de sumergibles, de varios submarinos convencionales y del nuevo submarino atómico nacional.

También creemos que es hora que las empresas que son financiadas por el BNDES en el exterior promuevan una acción institucional colectiva para explicar al público como funcionan los financiamientos de esta institución en este área y la importancia de la exportación de servicios de ingeniería para Brasil y la economía nacional, y que el BNDES haga lo mismo, ya que tiene el deber de rendir cuentas a la población.

Pero el primer compromiso de un periodista es con la verdad.

Y la verdad, más allá de los hechos citados, es que no se hacen grandes naciones sin grandes bancos públicos, como el BNDES, para financiar su desarrollo y sus exportaciones, sin una diplomacia activa en defensa de los intereses nacionales y sin grandes grupos empresariales, especialmente de las áreas de ingeniería e infraestructura, que puedan apoyar la venta de sus productos y servicios y proyectar – hacia lugares menos y más desarrollados que el nuestro – la imagen de un país activo y competente fuera.

Los financiamientos del BNDES en el exterior garantizan un millón quinientos mil empleos en Brasil, y la supervivencia de miles de empresas brasileñas, como las que proveen servicios y productos para clientes de la Odebrecht en el exterior, cuya lista, (sólo de las más importantes) retirada del sitio web de la empresa, estamos dispuestos a publicar después de este texto.

Son instrumentos de financiamiento, apoyo gubernamental, know-how avanzado, entre otros – los que distinguen a los países fuertes y exitosos de los más dependientes y débiles, y que abren camino hacia el avance de ciertas naciones en detrimento de otras, en un planeta cada vez más complejo y competitivo.

Y existen naciones que se arriesgan a esto, o se ven impedidas – infelizmente, incluso desde adentro – de alcanzar el desarrollo y el progreso, por el surgimiento, insidioso, de una quinta columna en la que desfilan, hombro con hombro, el arbitrio, la intriga, la hipocresía, la obsecuencia con los de afuera, la intolerancia con los más débiles, la manipulación, el auto-prejuicio y la ignorancia.



sábado, 20 de junho de 2015













(LA ONDA DIGITAL - URUGUAY - Traducido por Cristrina Iriarte) - El Senado Federal aprobó, esta semana, la constitución del Nuevo Banco de Desarrollo el llamado Banco de los BRICS, formado por los gobiernos de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, con un capital final previsto en 100 mil millones de dólares. La Cámara de Diputados ya había dado su autorización para la participación de Brasil en el proyecto, más allá de la constitución de un fondo de reservas para préstamos multilaterales de emergencia también por un valor de 100 mil millones de dólares.
Formar parte del Banco de los BRICS, y del propio grupo BRICS, de forma cada vez más activa, es algo esencial para Brasil, y para su inserción, con alguna posibilidad de autonomía y de éxito, en el nuevo mundo que se dibuja en el Siglo XXI.
En este nuevo mundo, la alianza anglo-norteamericana, y entre los Estados Unidos y Europa, que ya de por sí no es monolítica, cuyas contradicciones se pusieron en evidencia por sucesivas crisis capitalistas en estos primeros años del siglo, está siendo sustituida, paulatinamente, por el desplazamiento del poder mundial hacia una nueva Eurasia emergente – que no incluye a la Unión Europea – y, principalmente, hacia China, listos a superar, en pocos años, a los EE.UU. como la mayor economía del mundo. mauro-santayana-250Pekín ya es, desde 2009, el mayor socio comercial de Brasil, y también el mayor socio económico de muchos de los países latinoamericanos.
China ya es, también, la mayor plataforma de producción industrial del mundo.
Ya pasó el tiempo en que sus fábricas producían artículos de dudosa calidad, y, hoy, sus centenas de miles de ingenieros y cientistas – incluso en las universidades occidentales es difícil que se haga un descubrimiento científico de importancia sin la presencia o el liderazgo de un chino en el equipo – producen tecnología de punta que, muchas veces, no está disponible ni siquiera en los países occidentales más avanzados.
En este nuevo mundo, China y Rusia, rivales durante ciertos períodos del siglo XX, se están preparando para ocupar y desarrollar, efectivamente, las vastas estepas y cadenas de montañas que las separan y los países que en ellas se encuentran, construyendo, en esta inmensa frontera, hoy todavía poco ocupada, decenas de ciudades, carreteras, vías e hidrovías.
La pieza central de este gigantesco proyecto de infraestructura es el Gasoducto Siberiano. También llamado Gasoducto de Eurasia, fue lanzado en septiembre del año pasado en Yakutsk, en Rusia, e irrigará la economía china con 38 mil millones de metros cúbicos de gas natural por año, para hacer frente al mayor contrato de la historia, por un valor de 400 mil millones de dólares, que fue firmado entre los dos países.
En este nuevo mundo, la India, cuya población era masacrada, no hace muchas décadas atrás, por parte de la caballería inglesa, posee misiles con ojivas atómicas, es dueña de la Jaguar y de la Land Rover, del mayor grupo de acero del planeta, es el segundo mayor exportador de software del mundo, y manda, con medios propios, sondas espaciales a la órbita de Marte.
Y Brasil, que hasta hace poco tiempo, debía 40 mil millones de dólares al FMI, es acreedor del Fondo Monetario Internacional, y el tercer mayor acreedor exterior de los Estados Unidos.
Manipulada por una matriz informativa y de entretenimiento producida o reproducida a partir de los EE.UU., diseminada por redes y distribuidoras locales y por los mismos canales de TV por cable norteamericanos que pueden ser vistos en muchos otros países, la mayoría de la población brasileña ignora, infelizmente, la existencia de este nuevo mundo, y el surgimiento de esta nueva realidad que podrá influir, independientemente de su voluntad, en su propia vida y en la vida de la humanidad en los próximos años.
Más grave aún. Parte de nuestra opinión pública, justamente la que se considera, irónica y teóricamente, la más bien informada, se empeña en combatir a hierro y fuego este nuevo mundo, basada en un anticomunismo tan inconsistente como superado, que resurge como el aliento putrefacto de una momia, resucitando, como en las películas post-apocalípticas, a miles de zombis ideológicos.
Los mismos hitlernautas que alertan hacia los peligros del comunismo chino en sus comentarios en Internet y piensan que es un absurdo que Pekín, de un monto de 4 mil millones de dólares en reservas internacionales, le preste dinero a la Petrobras, o para infraestructura, al gobierno brasileño, usan tablets, celulares, computadoras, televisores de pantalla plana, automóviles, producidos por marcas chinas, o que poseen piezas “Made in China”, fabricadas por empresas estatales chinas o con capital público chino del Industrial & Commercial Bank of China, ICBC, el mayor banco del mundo.
Hijos de estancieros que producen soja, pollos, carne vacuna, de cerdo, destilan odio contra la política exterior brasileña, así como funcionarios de grandes empresas de minería, cuando no tendrían a quien vender sus productos, si no fuese por la demanda rusa y, en muchos casos, la china.
Nuestras empresas con negocios en el exterior son atacadas y ridiculizadas, como si sólo las empresas extranjeras tuviesen el derecho de instalarse y de hacer negocios en otros países, inclusive el nuestro, para enviar divisas y crear empleos, con la venta de servicios y equipos, en sus países de origen. Es preciso entender que al formar una alianza estratégica con Rusia, China, India y Sudáfrica, Brasil no precisa, ni debe, necesariamente, congelar sus relaciones con los Estados Unidos o con la Unión Europea. Pero podrá, con ellos, negociar en una condición más altiva y más digna como jamás lo hizo en el pasado.
Es en este sentido que se inserta la aprobación del Banco de los BRICS por parte del Congreso.
A pesar de haber escalado, desde 2002, siete posiciones entre las mayores economías del mundo, Europa y los EE.UU. se niegan, hace años, a reformular el sistema de cuotas para dar mayor poder a Brasil, y a otros países de los BRICS, en el FMI y en el Banco Mundial.
Si no lo quieren que no lo hagan. Como muestra el Banco de los BRICS, podemos crear nuestras propias instituciones financieras multilaterales.
Los BRICS, tienen, hoy, como grupo, no sólo el mayor territorio y población del mundo, sino también más del doble de las reservas monetarias de los EE.UU., Japón, Alemania, Inglaterra, Canadá, Francia e Italia, sumados. Lo que le molesta a los Estados Unidos y a Europa, y a sus acólitos, en Brasil, no es el supuesto comunismo o “bolivarianismo” del actual gobierno, sino el nacionalismo posible, hasta cierto punto tímido, políticamente contenido, y siempre combatido, de los últimos años.
Existe una premeditada, permanente, hipócrita, subalterna, entreguista, presión, que no se afloja, enfocada en que se abandone una política exterior mínimamente independiente y soberana, que pueda situar a Brasil, geopolíticamente, frente a los desafíos y a las oportunidades del mundo cada vez más complejo y competitivo del siglo XXI.

EL PT, EL PSDB Y EL ARTE DE ENGORDAR A LOS BUITRES.













(LA ONDA DIGITAL - URUGUAY - Traducido por Cristrina Iriarte) - Si existió un error recurrente, que puede ser trágico en sus consecuencias, cometido por la generación que participó de la lucha por la redemocratización de Brasil, fue permitir que la flor de la libertad y de la democracia, germinada en aquellos tiempos memorables, fuese abandonada, a su propia suerte, en el corazón del pueblo, relegada a segundo plano por la batalla, encarnizada y cortoplacista, de sus diferentes facciones, por el poder.
Se perdió la oportunidad – y en esto también debemos hacer un “mea culpa” – de aprovechar el impulso democrático, surgido de la muerte trágica de Tancredo Neves, para incluir en la currícula escolar de instituciones públicas y privadas, obligatoriamente, la enseñanza de nociones de ciudadanía y de democracia, así como de los Derechos del Hombre, establecidos en la Carta de las Naciones Unidas, y este tema podría haber sido específicamente tratado en la Constitución de 1988 y no lo fue. Al no haberse hecho esto, en aquel momento, la ascensión al poder de un auto-exiliado, el señor Fernando Henrique Cardoso, podría haber llevado al enfrentamiento de esta llaga histórica, y, más aún, por las mismas y más fuertes razones – la cuestión debería haber sido enfrentada en ocasión de la llegada al poder de un líder sindical proveniente de la capa menos favorecida de la población, dispuesto a entender la importancia de dar a otras personas como él, el acceso a la formación política que le permitió cambiarse a sí mismo e intentar, de alguna manera, hacer lo mismo con su país. Sin embargo, en varios años, no se hizo nada en este sentido.
Incluso tratándose de un tema fundamental – el explicarle a los brasileños, más allá de las eventuales campañas electorales llevadas a cabo por parte de la Justicia Electoral, la división y la atribución de los Tres Poderes de la República, nociones del funcionamiento del Estado, de los derechos y deberes del ciudadano, y de como se procesa, por medio del voto, la participación de la población – nunca hubo, y tratamos el tema muchas veces, ninguna iniciativa de este tipo, aunque pudiese haber sido adoptada en cualquier momento, por cualquier administración municipal.
Se pensó, equivocadamente, que bastaba volver a la elección, por el voto directo, del Presidente de la República, y redactar y promulgar un nuevo texto constitucional, para que se consolidase la Democracia en Brasil. En realidad, estas dos circunstancias deberían haber sido vistas apenas como el primer paso para un cambio más efectivo y profundo, que tendría que haber comenzado por una verdadera educación cívica y política de la población.
Se imprimió la Democracia en millones de ejemplares de la Constitución de la República, pero no en los corazones y mentes de la población brasileña.
De un pueblo que venía, históricamente, de una serie de cortas experiencias democráticas, interrumpidas por numerosos golpes, contra-golpes de todo tipo; educado a lo largo de las dos décadas anteriores, dentro de los ritos y mitos de una dictadura que precisaba justificar, de forma perentoria, el derrocamiento de un gobierno democrático y nacionalista – ungido por el plebiscito que le otorgó la victoria al presidencialismo – con la disculpa del bovino anticomunismo de la Guerra Fría, ciego e ideológicamente manipulado a partir de una potencia extranjera, los Estados Unidos.
A la ausencia de un programa de educación democrática para la población brasileña – y de la defensa de la Democracia como parte integrante, permanente, necesaria, a nivel del Congreso y de los partidos, del discurso político nacional, se sumó, en los últimos tiempos, la deletérea criminalización y judicialización de la política, antes, después y durante las campañas electorales.
Como parece no darse cuenta que la desestructuración de la Petrobras, del BNDES, de las grandes empresas de infraestructura, de otros bancos públicos, creará un efecto cascada que perjudicará a toda la nación, legándole una victoria pírrica, en el caso que llegue al poder en 2018, la oposición tampoco comprende, que al incentivar u omitirse, oficialmente, con relación a los ataques a la Democracia y a los llamados al golpismo por parte de algunos segmentos de la población, está dando un tiro por la culata, que sólo favorecerá a una tercera fuerza, con relación a la cual comete un terrible error, se cree que tiene una menor posibilidad de venir a controlar.
La misma cantidad del público radicalmente contrario al Partido de los Trabajadores, extiende ahora, paulatinamente, el proceso de criminalización de la política al PSDB y a otros partidos contrarios al PT, y ya hay quien defiende, en Internet y en las redes sociales, la tesis de que el país precisa librarse de las dos leyendas, y que la salida sólo vendrá por medio del rápido surgimiento de otra alternativa política, o de una intervención militar.
Bien intencionado en el área social, en la macroeconomía, en algunos momentos, y en áreas como las Relaciones Exteriores y Defensa, y actuando casi siempre bajo presión, el PT cometió innumerables errores – y no sólo de orden político – en los últimos años.
Dejar de investigar, con el mismo rigor que revitaliza ahora, ciertos episodios ocurridos en los ocho años anteriores a su llegada al poder, fue uno de ellos. Abrir la puerta a paracaidistas que nada tenían que ver con los ideales de su origen, atraídos por la perspectiva de poder, también fue un equívoco.
Como lo fue cerrar los ojos hacia el hecho de que algunos de sus militantes estaban cayendo, paulatinamente, en la tentación de dejarse seducir y contaminar, también, por las bendiciones y posibilidades derivadas de las victorias en las urnas. El mayor de todos, sin embargo, fue dejar de contestar, desde el principio, aquellos ataques más estrafalarios, sin otra motivación que la del odio y del preconcepto, que se evidenció desde que llegó a la Presidencia de la República.
Al adoptar, de forma persistente, esta posición, el PT le hizo un terrible y casi irreparable, favor a la Democracia.
En un país en que los blogueros son condenados a pagar indemnizaciones por decir que alguien es despreciable, la propia liturgia del cargo exige que un Presidente o una Presidente de la República usen la fuerza de la Ley para prohibir y ejemplarizar a quien los califica, pública y permanentemente, en Internet, de hdp, ladrón, bandido, asesina, terrorista, vaca, prostituta, etc, etc, etc. Y tal liturgia exige que esto se haga desde la asunción, no sólo para preservar a la autoridad máxima de la República, que no le pertenece a nadie en forma personal, ya que es conferida por el voto de millones de brasileños, sino, especialmente, para defender la democracia en un país y una región del mundo en que casi siempre estuvo amenazada.
Existe, por supuesto, la libertad de expresión, y existen la calumnia, el ataque a las instituciones, al Estado de Derecho, a la Constitución, que amenazan la estabilidad del país y la paz social, y el gobierno que elude la defensa de dichos pilares, en los cuales se fundamentan el Estado y la Nación, debería responsabilizarse directa, si no penalmente, por esta omisión.
Si Lula, Dilma, y otros líderes no se defienden, ni siquiera cuando son acusados de delitos como el descuartizamiento, el PT, como partido, hace lo mismo e incurre en el mismo error, al privarse de una defensa amplia y coordinada de la democracia – y no sólo en beneficio propio – dentro y fuera del entorno virtual.
En plena ascensión del discurso anticomunista y “anti-bolivariano” – Brasil ahora es un país “comunista”, con 55 mil millones de reales de ganancia para los bancos y 65 mil millones de dólares de Inversión Extranjera Directa el año pasado, y peligrosos marxistas, como Katia Abreu, Guilherme Afif Domingos y Joaquim Levy en el gobierno – su militancia insiste en vestirse de rojo como el diablo, como adoran recordar sus adversarios, cada vez que pone un pie en la calle. Esto, mientras raramente abandona, al mismo tiempo, el espacio de comentarios de los grandes portales y redes sociales, leídos por la mayoría de los internautas, a golpistas que se apropian de los colores de la bandera, ahora inclusive como un slogan.
Al hacer lo que están haciendo, el gobierno, el PT y el PSDB, están fortaleciendo una tercera fuerza, y especializándose en el peligroso arte de engordar a los cuervos.
¿De qué se alimenta la extrema derecha?
Del odio, de la violencia, del preconcepto, de la criminalización de la política, de la infiltración y de la preparación del Estado, del divisionismo, de la difusión terrorista de la calumnia, de los rumores y de la desinformación.
En el futuro, cuando se estudie el corto período de 30 años que nos separa de la redemocratización, se podrá ver con claridad – y esto lo echarán en cara los patriotas postreros, si es que los hay, en esta Nación – como la vacilación, la imprevisibilidad, la aversión a la planificación, la anemia partidaria y la más absoluta incompetencia por parte de la comunicación del PT, principalmente en la enumeración y difusión de datos irrefutables; y el irresponsable fomento al antinacionalismo y a la paulatina criminalización y judicialización de la política, por parte, con el PSDB al frente, de la oposición, consiguieron transformar el país libertario y nacionalista, que emergió de la lucha por la Democracia y que reunía a millones de personas en las calles para defender estos ideales hace 30 años, en una nación fascista, retrógrada, políticamente anacrónica, antinacional y conservadora, que reúne, ahora, en las calles, a personas para atacar al Estado de Derecho, el quiebre de las reglas que lo sustentan, y la interrupción del proceso democrático.
Un país cada vez más influenciado por una derecha “emergente” y embozada – abyecta y sumisa al extranjero y llena de prejuicios y arrogante con la mayoría de la población brasileña – estúpida, golpista y violenta, que está extendiendo su influencia sobre sectores de la clase media y del lumpen proletariado, y creciendo, como cáncer, en la estructura de la administración del Estado, en el área de seguridad, en los medios religiosos, en los medios de comunicación y en la comunicación.
Se destruyó la alianza entre la burguesía nacionalista y los trabajadores, que condujo al país a la Campaña de las Directas y a la elección de Tancredo Neves como primer presidente civil, después de 21 años de interrupción del proceso democrático.
Se destruyó la articulación de las organizaciones y sectores más importantes de la sociedad civil, en defensa del país, del desarrollo y de la democracia. Se destruyó, sobre todo, la esperanza y el nacionalismo, que, hoy, sólo persisten a un alto costo, en el corazón abnegado de patriotas que luchan, como Quijotes aguerridos e impolutos, en pequeñas organizaciones, y, sobre todo, en Internet, para evitar que la Nación naufrague, definitivamente, en medio de la desinformación, al escollo moral y a la apatía suicida de la actualidad; al pesado bombardeo de las fuerzas que codician, desde el exterior, nuestras riquezas; y que Brasil abandone y relegue, como quinto mayor país del mundo en territorio y población, cualquier intención que ya haya tenido de ocupar, de forma altiva y soberana, el lugar que le corresponde en el concierto de las Naciones.
Cuando se ve brasileños pidiendo a la Casa Blanca que interventa en la vida nacional, defendiendo la total privatización, desnacionalización y entrega de nuestras mayores empresas, a cambio, descaradamente, de comprar, como en el país del Tío Sam, por un real un litro de gasolina – si fuera por esta razón, ¿por qué no se mudan para Venezuela, y van a llenar sus tanques en estaciones de PDVSA, empresa 100% estatal, donde está costando 15 centavos? – tratando a los medios de comunicación extranjeros y pseudo organizaciones de todo tipo con sede en Europa y en los Estados Unidos como oráculos indiscutible a los que se debe reverencia y obediencia absolutas, los enemigos de Brasil se ríen, y se les hace agua la boca, anticipando la división y el deshilache de nuestra sociedad, y nuestra entrega y capitulación a sus dictámenes, con la definitiva colonización de nuestra Patria, y, sobre todo, del alma brasileña.
No hay mucho más para hacer – corriendo el riesgo de ser tildados una vez más de locos, ridículos y seniles, extintos, y sin más lugar en este mundo, que el de los reptiles que otrora cruzaban las planicies de Pangea – que pregonar, como João Batista, en el desierto, masticando las langostas del odio y del sarcasmo.
Es preciso reunir a los demócratas y a los nacionalistas donde los haya, para evitar y contraponerse, de forma inteligente, coordinada, al fortalecimiento descontrolado, ya casi inevitable, de las fuerzas antidemocráticas y antinacionales. El gobierno y la oposición – al menos la más equilibrada – necesitan dejar de echarle cebo a las aves de rapiña, que, dentro, y fuera del país, ansían y ya anticipan nuestra destrucción, y el control definitivo de nuestra población y de nuestras riquezas.
Cuando se hayan terminado, por el natural agotamiento e imposición de las circunstancias, los equívocos, las concesiones, los engaños, las omisiones, las pequeñas felonías, las traiciones a la verdad, al pasado y al futuro, ¿de qué se alimentarán los cuervos?

BRASIL: SOSPESA, DILMA Y EL SANTANDER













(LA ONDA DIGITAL - URUGUAY - Traducido por Cristrina Iriarte) - Dice la sabiduría popular que el pollo que sigue al pato termina muriendo ahogado. Siempre nos resultó extraño, a lo largo de los últimos gobiernos, la excesiva atención reservada, por la clase política brasileña, hacia lo peor que existe del empresariado ibérico, sobre todo los que vinieron de España a partir de los años 90.
Se creó en nuestro país, con el ingreso de Madrid en la zona euro, la ilusión de que España, que había pasado la mayor parte del siglo XX sumergida en una dictadura medieval y agraria, habría sido – mediante el simple cambio de la peseta por una moneda más valorizada – repentinamente promovida al desarrollo. En los siglos XIX y XX, en un proceso que se venía consolidando desde el derrocamiento de su Invencible Armada, Madrid vivió a la sombra de Inglaterra y de los EE.UU., que se apoderaron de lo que quedó de su imperio, en la Guerra Hispanoamericana de 1898.
De Cervantes a Picasso, España dio una gran contribución al mundo. Pero nunca fue el paradigma de de la iniciativa empresarial y de la pujanza que aportó aquí en la época del PROER y de las grandes privatizaciones.
Desde 2008, por lo menos, se sabe que la “fortaleza” ibérica estaba basada en miles de millones de euros en ayuda de los fondos de la Comunidad Europea y en cientos de miles de millones de euros en deudas, que dejaron a su paso un desempleo de casi el 30%, y miles de familias desalojadas y de jubilados perjudicados por los bancos.
Cuando se habla del IDH español, es preciso recordar que, por detrás de él, está una de las mayores deudas per cápita del mundo. Y que, si no fuese por el hábito de exportar sus problemas y sus desempleados hacia países como el nuestro, cada dos generaciones, los españoles no tendrían el nivel de vida que tuvieron hasta hace pocos años atrás. En la época en que, en América Latina, había mayoría de gobiernos neoliberales, los “empresarios” españoles eran recibidos, aquí, como potentados.
Y, lo que es peor, continuaron teniendo derecho a las mismas adulaciones después de la crisis, cuando sus ”grandes” empresas, altamente endeudadas, comenzaron a depender, como del agua para un pez en el desierto, de las exorbitantes utilidades obtenidas en territorio brasileño.
Siempre nos sorprendió – y sobre esto ya escribimos con anterioridad – el número de veces en que el Señor Emilio Botín – investigado, en el pasado, en su país y vilipendiado por gran parte de la población española – fue recibido en el Palacio por la Presidente Dilma.
Nunca es conveniente que un presidente de la República reciba personalmente a hombres de negocio y, mucho menos, si son extranjeros. Para esto existen los ministros, como el de Industria y Comercio o el de Hacienda, por ejemplo.
Si hubiese evitado las sonrisas y las fotografías que le brindó al dueño del Santander, en tantas oportunidades, con seguridad la Presidente Dilma se estaría sintiendo, ahora, menos avergonzada – después de la carta enviada por este banco a los “inversores”, criticando duramente la orientación y las expectativas económicas de su gobierno.

ESPIONAJE CONTRA ITAMARATY: ¿QUE HAY DETRÁS DE ITALEAKS?












(LA ONDA DIGITAL - URUGUAY - Traducido por Cristrina Iriarte) - Los “hackers” que se identifican como “anonymous”, involucrados en el espionaje contra el Itamaraty, pusieron en circulación, en internet, cerca de 100 mensajes de e-mail, intercambiados entre diplomáticos brasileños. Los mismos están siendo analizados por la Policía Federal y por el propio ministerio, para determinar su origen y autenticidad. El hecho que el Itamaraty haya sido elegido como blanco de espionaje es significativo y exige rigor en la identificación del origen y del propósito de los autores de la operación.

Cuando estalló el escándalo de Wikileaks, éste se basó, en buena parte, en la difusión de correspondencia diplomática – e-mails y mensajes internos – del Departamento de Estado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de los Estados Unidos. No es ningún secreto tampoco, que a los norteamericanos no les agradó el hecho que las informaciones sobre el escándalo del espionaje de la NSA hayan sido divulgadas por el periodista inglés Glenn Greenwald, amigo de Edward Snowden, a partir del territorio brasileño.

Siempre existió la sospecha que los Anonymous, que desempeñaron un papel significativo en la campaña de desestabilización institucional promovida, a partir de internet el año pasado, en esta misma época del año, estuviesen ligados a intereses externos.

Los mensajes del Itamaraty elegidos hasta ahora para ser divulgados, contrarían, coincidentemente, todas ellas, posiciones norteamericanas y el discurso adoptado por los EE.UU. en la ONU, en la prensa internacional y en instituciones multilaterales, en temas en los cuales Brasil se ha opuesto a los Estados Unidos en los últimos años.

Este es el caso del rechazo a las sanciones contra Irán, de la defensa del diálogo, de la vía diplomática y del derecho al uso de la energía nuclear para fines pacíficos; del espionaje de Brasil por parte de la NSA; y de la defensa de Cuba, en cuanto a su clasificación por parte de los Estados Unidos, como estado terrorista – temas abordados en los mensajes difundidos. Si el grupo que está por detrás de la infiltración tenía la intención de poner a Brasil contra la pared, con la difusión de los documentos del Itamaraty, se trató – por lo menos hasta ahora – de un tiro por la culata.

Los documentos divulgados por Julian Assange y sus colaboradores en Wikileaks, dejaron en evidencia ante el mundo la arrogancia norteamericana; su falta de respeto hacia los otros países; hacia personalidades; hacia las reglas diplomáticas. Los documentos denunciaron también la nefasta y rastrera manipulación de las relaciones internacionales, a los efectos de preservar la actitud hegemónica e imperial con relación al resto del mundo.

Los e-mails del Itamaraty prueban – al menos por lo que fue divulgado hasta ahora – que somos, en el ámbito diplomático, una nación equilibrada, coherente y democrática, empeñada en la defensa de la paz, del multilateralismo y – salvo por expreso mandato de la ONU – del principio de no intervención, en estricta obediencia a nuestro texto constitucional

quarta-feira, 13 de maio de 2015

RECONOCIDO PERIODISTA BRASILEÑO DENUNCIA MANIOBRAS PARA PRIVATIZAR EL PETRÓLEO DEL PRESAL




(Sputniknews.com) - Veterano periodista brasileño, Mauro Santayana, denunció a través de un artículo de opinión titulado "El Terror no justifica entregar el presal", las maniobras de diferentes lobbys, dentro y fuera del gobierno, para acabar con la exclusividad de Petrobras en los campos de petróleo del presal.

Según él, la reciente campaña mediática que propugna el fin de la exclusividad, que por ley otorga a Petrobras al menos el 30% de la explotación de los recursos, no tendría ningún sentido "cuando la producción de esa área creció un 70% en el mes de marzo y se aproxima a los 500.000 barriles por día".

Santayana destacó además el reciente galardón de la Offshore Technology Conference (OTC), por tercera vez consecutiva, que acredita a Petrobras como la compañía petrolera líder en el mundo en cuanto a la investigación y aplicación de la tecnología offshore que, señaló el periodista, "acaba de descubrir reservas de 700 millones de barriles en los campos del Golfo de México de Cascade, Chinook y Hadrian South".

"¿Cual es la lógica de abandonar la operación del presal en tu propio país donde puede generar empleos y renta, contratación de servicios y petróleo de mejor calidad?", se preguntaba irónicamente el autor quien destacó como articulador de la campaña electoral del expresidente Tancredo Neves en 1985.

En su denuncia, Santayana argumentó que "sería un retroceso entregar la mayor reserva de petróleo descubierta en el siglo a empresas como Exxon que acaba de perder el título de mayor productora de petróleo de capital abierta del mundo" y recordó que las acciones de Petrobras se revalorizaron un 60% desde el pasado mes de enero.

En conclusión, el periodista alertó que al igual que ocurrió en los noventa, "se ha creado un clima de terror para promover la entrega de una de las últimas empresas bajo control nacional a los extranjeros".

segunda-feira, 18 de julho de 2011

EL NUEVO 'MANU MILITARI" DE LOS VIEJOS DOMINADORES COLONIALES.


En los últimos veinte años con la globalización neoliberal aumentó el dominio de los países centrales. Razón tuvo Disraeli, el controvertido hombre de estado británico, cuando dijo que las colonias no dejan de ser colonias por el simple hecho de haberse declarado independientes. Esa dominación indirecta no les basta : quieren volver al estatuto colonial abierto de par en par. Al percibir señales de insurrección general de los pueblos contra la opresión de quienes les responden en el poder toman la iniciativa de la represión preventiva.
La doctrina de la guerra preventiva de Bush sigue vigente y está siendo actualmente aplicada por Francia y Gran Bretaña, por delegación de Washington. Los usamericanos bien intencionados que votaron a Obama descubren que no pueden cambiar el sistema a través de los procesos electorales. Como denunciara y previera Eisenhower el gran presidente republicano – y más importante militar del siglo pasado - quien domina el sistema es el « complejo industrial-militar », con su actualmente repartida conducción entre el Pentágono y Wall Street.
El presidente Obama se parece, cada día más, a Bush. Aunque su objetivo final sea el mismo, se esmera en hablar tranquilamente con América latina mientras azuza a sus aliados contra Libia, en un movimiento de reconquista imperial del norte de Africa. Igual que Tony Blair en el caso de Irak, Cameron se dispone a hacer el trabajo sucio. Según el semanario alemán Focus, ya había en Libia comandos británicos varias semanas antes de la oficialización de la alianza.
El movimiento para la re-colonización por parte de las antiguas metrópolis, se desarrolla « pari passu » junto a la globalización. Y obedece al hipócrita discurso de que fuera de los modelos católicos y protestantes de la civilización occidental, todos los pueblos son bárbaros e incapaces de autogobernarse.

La realidad es totalmente diferente : con el objeto de mantener los niveles de confort y de consumo de los países occidentales es necesario disponer de todos los recursos humanos y naturales de la periferia.
El espacio asiático de saqueo se reduce mientras tanto debido al aumento de la población y del consumo conforme a los patrones occidentales – y el crecimiento de China. Pero todavía está el gas y el petróleo del Caspio por los que los usamericanos buscan controlar a Afganistán y amenazan a Irán. Mantener los manantiales petrolíferos de Medio Oriente y del Norte de Africa son su principal objetivo – a pesar de su hipócrita discurso sobre el medio ambiente... La misma hipocresía se pone de manifiesto cuando declaran que no quieren alcanzar a Kadafy : su complejo residencial fue atacado con misiles por Obama, del mismo modo como lo hizo Regan en 1986, matando a una hija del dirigente libio.
Al mismo tiempo les conviene asegurarse la provisión de minerales y de alimentos de América Latina y del Africa negra. Amenazados por la penetración de los chinos en el continente africano, están dispuestos a jugarse el todo por el todo, con tal de restaurar su antigua dominación. Y no faltan los socios menores, los subcontratistas del colonialismo como son los españoles y los italianos. Los españoles nostalgiosos de Carlos V y de Felipe II se unen a Obama, Cameron, Sarkozy. No existen diferencias entre Zapatero y Aznar : ambos son lo mismo, en sus esfuerzos por reconquistar América del Sur. Los italianos son menos insistentes, saben que aunque caiga Kadafy, Libia no les será devuelta.
Los neocolonialistas tratan de aprovechar una rebelión sin ideas, aunque justa, contra la corrupción y el poder dictatorial de los países árabes. Pero no es seguro que logren éxito.
Los usamericanos siempre crean, estimulan y financian movimientos de oposición en los cuales su interés es desestabilizar los gobiernos y los sistemas políticos. Estamos recordando en estos días del 1964. Podríamos recordar todos los años anteriores, sobre todo del período 1945-1954 cuando Vargas, elegido presidente de Brasil, creó los instrumentos económicos necesarios al desarrollo independiente, con grandes empresas estatales. Después de muerto el gran presidente Juscelino consiguió mantenerse gracias a la sabia opción política de movilizar a la nación en tareas para el crecimiento acelerado.
De modo que no debe sorprender que sus agentes y aliados, de los países musulmanes hayan estimulado el movimiento que se inició en Túnez de manera aparentemente accidental. Los jóvenes de estos países estaban insatisfechos con su vida. Les faltan oportunidades de realización profesional y personal. Su libertad es limitada y su sueños se mueren ante una sociedad cerrada en si misma.
El último 21 de marzo, el New York Times publicó un artículo de un joven de 24 años, exitoso colaborador del respetable « Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York », Mattew C. Klein en el que analiza la situación de los jóvenes estadounidenses y muestra que la situación de desempleo es similar a la de los jóvenes de los países pobres y de que sus sueños se hallan igualmente limitados. Podría haber mencionado también el desencanto con el gobierno del sector no alienado de la juventud de su país, con la corrupción parlamentaria y con el indecente comportamiento de las grandes corporaciones que están a la cabeza de Wall Street, con el belicismo de su país. El hecho de que haya libertad de prensa y elecciones periódicas no reduce el absolutismo esencial del sistema usamericano. El pueblo vota cada cuatro años, la prensa es libre, el sistema judicial funciona, aunque no siempre la Suprema Corte juzga con imparcialidad. Pero aún así la libertad como en otras partes es un bien de mercado. Es necesario comprarla.
Los derechos humanos aun cuando proclamados en altisonantes declaraciones son también violados en los Estados Unidos y en los países que les rinden pleitesía. Basta recordar lo que pasa en Guantánamo, lo que fue registrado en Abu Graib y las condiciones a que se halla sometido el soldado usamericano Bradley Manning en una prisión naval.
El pretexto de que la intervención en Libia se hace en nombre de los derechos humanos y de la protección a los civiles es inmoral. Y considerada insensata hasta por los mismos parlamentarios británicos, como lo hace el diputado Rory Stewart en un artículo publicado por la London Review of Books el día 18 [de marzo de 2011]. Stewart no es un hombre de izquierda. Diputado por uno de los tradicionales reductos conservadores del Noroeste de Inglaterra el de Penrith and the Border, el parlamentario muestra conocimiento del tema. Formó parte de las tropas británicas en Irak y luego atravesó a pié Afganistán, como parte de un viaje más extenso, de 6 mil kilómetros, desde Turquía al Nepal que duró dos años.
Aunque conservador, Stewart considera un error la participación de su país en las cruzadas anti-islámicas. Justifica en parte la intervención en Yugoslavia, en nombre de la protección de las poblaciones civiles ante las amenazas de genocidio – pero no esta de acuerdo con las demás. Reproducimos algunos textos de su artículo « Here we go again » :
Parecía doblemente improbable que Inglaterra interviniera algún día militarmente en un país como Libia. Aunque pobre en petróleo, Afganistán en Asia central fue visto por muchos musulmanes como objeto de ocupación por cruzados infieles comandados por Israel, y con el objetivo de establecer bases militares y obtener petróleo barato. Cualquier movimiento contra Libia, - país árabe musulmán, embarcado en una lucha sin tregua contra el colonialismo y sudando petróleo – daba la impresión de que sería visto como un movimiento extremadamente hostil y siniestro primero por sus propios vecinos árabes, pero también por el mundo desarrollado y hasta por los propios libios.
El caso Libia no responde ni siquiera a los criterios del derecho internacional como objetivo de la intervención militar. Kadafi es el poder soberano, no los rebeldes ; no estaba realizando un genocidio, ni una limpieza étnica. En Bosnia la situación era diferente : en pocas semanas habían muerto 100 mil personas. Y la propia Bosnia –estado soberano aunque no reconocido por la ONU – pidió formalmente la intervención.
El caso Kosovo fue menos claro, pero la intervención apuntó a Milosevic y llegó después de la guerra de los Balcanes que él iniciara forzando al éxodo a 200 mil personas con abundantes pruebas de la gran cantidad de atrocidades cometidas en nombre de preconceptos étnicos. Ese tipo de actitud en que se estima que una intervención militar es legal y que en 1999 parecía la quintaesencia de la gobernabilidad y del consenso global, dejo de ser un concepto dominante en Occidente.
Como diputado de la Cámara de los Comunes creo que tal vez haya llegado la hora de recordar que a pesar de su desgracia Afganistán y hasta Inglaterra pueden tener aún un papel constructivo en el mundo.
Finalizando su artículo el parlamentario es sin embargo más pesimista y vuelve sobre los pretextos de los colonizadores :
Nada me saca de la cabeza que el mayor peligro, no es la desesperación sino las irrefrenables decisiones, casi hiperactivas, el sentido de alguna obligación moral, el miedo de los estados-bandidos, de los estados fracasados, a perder nuestra « credibilidad . Eso me hace temer que estamos al principio de una década de super intervención militar.
Rory Stewart (nacido en Hong Kong, de padres ingleses, educado en Inglaterra) confirma así el objetivo de otro movimiento colonialista, de nuevo « manu militari » de los viejos dominadores. Acosados por la falta de petróleo barato, se aferran al pasado buscando mantener su seguridad y su orgullo, como dueños del mundo.
Traducción del portugués para ATTAC Argentina de : Susana Merino